Argentino, sobre todo
Actualizado a 12/07/2021 09:25
Leo Messi no solo es argentino sino que ha luchado denodadamente por no dejar de serlo. Lleva más años en Castelldefels que en Rosario pero por su acento uno diría que nunca se fue de allí. Habría mucho que teorizar desde una perspectiva freudiana acerca de ese deseo extremo de pertenencia. Quizás responde a la voluntad de ocultar una profunda herida que seguramente no cicatrizó del todo hasta el domingo en Maracaná, gracias a una victoria que permitió al futbolista saldar una deuda que por momentos pareció infinita, la de no darle a Argentina, país del que se fue de niño, una alegría de campeonato. Ahora ya está. 28 años después Argentina tiene su Copa América. El trauma, dejar su vida entera atrás y cambiar prácticamente de planeta siendo un crío de carácter muy reservado, debería haber caducado al fin. Las imágenes del capitán manteado por sus compañeros, por un país en realidad, llorando de felicida