Mientras las FF. AA. utilizan las escuelas como bases militares y acosan a las organizaciones educativas no gubernamentales, los padres, maestros y estudiantes ven a la desobediencia civil como un mecanismo de resistencia.
Su identificación en Colombia pone en alerta a la región, principal exportadora de esta fruta. Autoridades aseguran que el brote está controlado pero refuerzan controles.
Son muchos los casos de personas, que pese a no tener la condición de comuneros calificados lograron de forma irregular ocupar territorios comunales sin tener ningún derecho.
En cuanto a violencia política y terrorismo, hemos tenido bastante en nuestra historia y SL ha sido la última manifestación y también la peor, dice el historiador Antonio Zapata entrevistado por el Idehpucp.