El kirchnerismo salteño, definitivamente, no pasa por su mejor momento. A los escándalos nacionales que involucran a los ex referentes de La Cámpora que ocuparon cargos en ANSES y PAMI, se suman las divisiones políticas internas y, ahora, un enojo que hace tambalear la estructura de uno de los mayores líderes que tuvo este espacio político en los últimos 15 años.