Por: Carlos F. Chamorro Publicado 19-07-21 La salida empieza por desconocer la reelección de Ortega, liberar a todos los presos políticos, y suspender el estado policial. Faltan menos de cuatro meses para las elecciones del 7 de noviembre, que se llevarán a cabo sin transparencia ni competencia política. La dictadura Ortega Murillo mantiene en la cárcel a los seis precandidatos presidenciales de la oposición, que tienen mayor opinión favorable e intención de votos en las encuestas, y que competían para ser “el candidato único de la oposición”. Eliminada la oposición de forma anticipada, con un Consejo Electoral controlado por el FSLN y sin observación internacional, la pregunta que todo mundo se hace no es quién va ganar las votaciones, sino cuáles serán las consecuencias políticas y económicas de la cuarta reelección de Daniel Ortega sin legitimidad nacional e internacional.