18/07/2021 23:26 El ejercicio del poder es una historia de amor que no suele acabar bien. Los políticos llegan al gobierno con el apoyo de la mayoría de los ciudadanos, encumbrados por la admiración general. Son la solución a los males del país. Pero la meteorología cambiante de la actualidad y la erosión inevitable del tiempo no perdonan, y con muy pocas excepciones al cabo de unos años se van a casa derrotados, convertidos en los culpables de todos los males del país. Invito al lector a hacer un poco de memoria. De Adolfo Suárez a Mariano Rajoy, no encontrará ningún presidente del Gobierno que no se fuera de la Moncloa por la puerta de atrás. Es lo normal. La política es así. Con la excepción de Calvo-Sotelo, que llegó a la Moncloa tras el 23-F, todos fueron recibidos con grandes esperanzas, al menos por parte de los suyos. Después, fueron perdiendo el apoyo de los ciudadanos y, cuando abandonaron el poder, todos sintieron la necesidad de reivindicarse. Un día alguien escribirá una novela con un argumento similar al de