13/07/2021 01:29
Para explicar que toda su vida había sido un error, un malentendido gobernado por la desidia y el azar, Proust necesitó escribir una novela de tres mil páginas. Y para analizar la tragedia que supuso la revolución soviética, el historiador ruso residente en Estados Unidos Yuri Slezkine ha precisado de mil quinientas. Las que conforman La casa eterna , recién editada por Acantilado con el esmero que les es propio y que resulta la mejor de las lecturas para unas vacaciones que se anuncian tórridas. Ya saben que todo lo ruso es de lo más refrescante.