Glovo
’ para entregar algún pedido a domicilio y mientras tanto, sentado en el suelo estudia a la luz de una farola. Sacó su libro y unos apuntes y estuvo estudiando casi 20 minutos hasta que le entró un pedido”, se lee en la descripción del usuario de
Facebook, que rápidamente fue replicada y compartida en varias plataformas sociales.
“Mientras unos rompen escaparates, saquean tiendas y destrozan las calles en favor de un delincuente reincidente, otros buscan la forma y sacan tiempo de donde sea para labrarse un futuro prometedor. Sobra decir que mi aplauso del mes va para este joven desconocido”, agregó resaltando la dedicación del joven repartidor de