No es tan difícil, ni tan caro y la posibilidad de recibir castigo es muy baja porque las leyes solo los clasifican como lesiones, aunque en realidad se trata de un homicidio que nunca termina porque la víctima no muere, pero si está muerta. Los ataques con ácido están aumentando peligrosamente en nuestro país.
Las agresiones con ácido o cualquier otra sustancia corrosiva, como la cal viva o la sosa cáustica, no son nuevos, pero su uso como método de venganza no era