PATXI FERNÁNDEZ y UNAI MEZCUA Madrid Miércoles, 30 junio 2021, 00:15
Una de las apuestas más arriesgadas que hemos visto últimamente entre las marcas de automóviles es sin duda la del AMI. Tanto que la propia
Citroën no define a este vehículo como coche sino como objeto disrruptivo de movilidad .
Ya rodando por las calles españolas, tiene como principal objetivo cubrir las necesidades de un nicho de mercado que sin duda crecerá en los próximos años, el de facilitar la movilidad en los centros de las ciudades, que cada vez estarán más vedados a los coches convencionales , y particularmente a los térmicos.