El invento de las vacaciones RON CASE - Archivo Tras el solsticio de verano del 21 de junio llega, por este hemisferio del norte, el periodo en el que siguen concentrándose las vacaciones, los descansos temporales anuales para ‘cargar las pilas’ y cambiar de ambiente. Esta es la tónica social aquí y para quienes pueden, que ni son todos ni en todos los lugares. Este año es un verano especial, el de la casi pospandemia. La euforia veraniega está más que justificada, tras el annus horribilis, aunque las nuevas variantes covid amagan con rebajarnos el optimismo. Hay necesidad de moverse porque del turismo, aunque alguno lo cuestione, vive mucha gente. Y la dicotomía economía/salud no tiene que ser excluyente si está casi asegurado lo segundo y lo primero también es vida.
El invento de las vacaciones
El invento de las vacaciones 11·07·21 | 02:39 Tras el solsticio de verano del 21 de junio llega, por este hemisferio del norte, el periodo en el que siguen concentrándose las vacaciones, los descansos temporales anuales para ‘cargar las pilas’ y cambiar de ambiente. Esta es la tónica social aquí y para quienes pueden, que ni son todos ni en todos los lugares. Este año es un verano especial, el de la casi pospandemia. La euforia veraniega está más que justificada, tras el ‘annus horribilis’, aunque las nuevas variantes covid amagan con rebajarnos el optimismo. Hay necesidad de moverse porque del turismo, aunque alguno lo cuestione, vive mucha gente. Y la dicotomía economía/salud no tiene que ser excluyente si está casi asegurado lo segundo y lo primero también es vida.
10·07·21 | 04:02 Tras el solsticio de verano del 21 de junio llega, por este hemisferio del norte, el periodo en el que siguen concentrándose las vacaciones, los descansos temporales anuales para ‘cargar las pilas’ y cambiar de ambiente. Esta es la tónica social aquí y para quienes pueden, que ni son todos ni en todos los lugares. Este año es un verano especial, el de la casi pospandemia. La euforia veraniega está más que justificada, tras el ‘annus horribilis’, aunque las nuevas variantes covid amagan con rebajarnos el optimismo. Hay necesidad de moverse porque del turismo, aunque alguno lo cuestione, vive mucha gente. Y la dicotomía economía/salud no tiene que ser excluyente si está casi asegurado lo segundo y lo primero también es vida.