Hace pocos días los habitantes del valle de Sula vivimos un temblor de 5.2 grados de magnitud en la escala de Richter, de acuerdo con reportes de distintos observatorios de eventos
Nos acostumbramos. De la misma manera en que sucede con el mobiliario urbano, ya no nos sorprenden. Llegan a ser invisibles porque hemos asumido como normal el hecho de encontrarlo