Actualizado a 19/07/2021 08:43
Negociar, pactar y… cumplir. Los dos primeros conceptos alimentan el arte de la política; el tercero, se soslaya y obliga a seguir negociando cuando lo que se impone es el interés electoral y las urgencias del calendario. Pedro Sánchez y Pere Aragonès han fijado su agenda de negociación pero sólo hay un pacto previsible, el que debe dar luz verde a los presupuestos para el próximo año con los votos de ERC. Así que mientras Aragonès hace bandera de la demanda de una amnistía y un referéndum de independencia, en ERC y Junts temen que Sánchez convierta la comisión bilateral en mesa de negociación presupuestaria y llene la mesa de diálogo con discusiones sobre el autogobierno, propias de la bilateral. “Constitución y ley”.