Los nenúfares son muy exigentes. Claude Monet, pintor impresionista y, lo que a veces se ignora, jardinero impresionante, lo sabía muy bien. Reclaman más de seis horas al día al sol y por ello se desaconseja plantarlos cerca de las orillas si hay árboles que dan sombra. También son propensos a ser colonizados por.