La reapertura del caso de Roxana, indígena oaxaqueña acusada de exceso de legítima defensa, representa para la familia un aliento de esperanza.“Sabemos que ella puede salir y eso nos hace sentir bien, nos da tranquilidad saber que podremos verla de nuevo y que ella esté con su hijo”, expresó Saraí Mejía, familiar de Roxana.