Suiza es una selección multinacional con hondas raíces balcánicas, pero también africanas e hispanoamericanas.
Empezando por el entrenador, Vladímir Pétkovic, los jugadores del equipo helvético son una auténtica torre de babel futbolística.
Sangre balcánica
El artífice de que la mezcla funcione como un reloj suizo es un bosnio de sangre croata nacido en Sarajevo.
Pétkovic emigró a Suiza en 1987. No fue un gran futbolista, pero ha triunfado como entrenador. Primero en Young Boys, después en el Lazio y ahora con la selección de su país de adopción.