Tegucigalpa (Proceso Digital /por Isis Rubio) – El uso de explosivos en los enfrentamientos entre privados de libertad en las cárceles denominadas de máxima seguridad y las armas de grueso calibre que portan los reclusos se convierten en otro detonante de alerta ante la inseguridad y la falta de polÃticas para establecer un control en las cárceles de Honduras.
De los cuatro enfrentamientos en cárceles de máxima seguridad registrados en este mes, en dos de ellos se reportan explosiones de granadas y el uso de armas de fuego de grueso calibre.
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Honduras (OACNUDH), solicitó a las autoridades investigar la entrada y uso de armas de fuego en las cárceles.