Sánchez ha dado un gran paso para
liquidar el régimen constitucional del 78 y proceder a la voladura, que imagina controlada, de la nación española. El nuevo Gobierno es mucho más fuerte que el anterior, más sanchista si cabe, y presenta menos fisuras para finalizar el verdadero proyecto, que es el cambio, mediante leyes habilitantes, como las de Hugo Chávez, copia de las de Hitler en 1934, del régimen constitucional.
Se le va a dar la vuelta a la Transición mediante la fórmula que
Torcuato Fernández Miranda enunció como "de la Ley a la Ley". Así se hizo la Transición, así llegó la democracia, así se conservó la Nación y así tuvimos Constitución.