Sergio Raul Cortes Camacho
11 de julio 2021 , 06:00 a. m.
La Copa América acabó, con Argentina campeona en el mismo Maracaná, destronando a los locales del título en su propio feudo. Neymar vio festejar a su gran amigo Lionel Messi, pese a los múltiples intentos del brasileño, la labor de la ‘albiceleste’ fue de escalonarlo, no dejarlo pensar, si era necesario, acudir a la fuerza física para detenerlo, que terminó siendo constante en el final del partido.
Desde el planteamiento, Neymar empezó con el 4-3-3 como un falso nueve, pero con las libertades de poder moverse por todo el frente de ataque, buscando generar peligro. En la fase de ataque, Brasil cambiaba de esquema a un 4-4-2 en donde el 10 y Richarlison eran los hombres en punta, con el cambio del atacante del PSG, como media punta, empezando a jugar de afuera hacia adentro, siendo el hombre de apoyo para generar sociedades.