27/07/2021 01:00
Actualizado a 27/07/2021 06:00
Momiji Nishiya se enfundó el oro de skate con 13 años y compartió podio con una brasileña de la misma edad y otra japonesa de 16 un día después de que la mítica gimnasta uzbeka Oksana Chusovitina, de 46 años, se despidiera entre lágrimas, emocionados abrazos de técnicos rivales y aplausos de adversarias rendidas. La deportista uzbeka había realizado su último salto. “¿Cómo a su edad puede atreverse a hacer algo así con su cuerpo?”, se preguntaba Nadia Comaneci, la reina de Montreal que se retiró con 19 años. Chusovitina ya lo había dejado a los 37 años, después de competir en los Juegos Olímpicos de Londres en el 2012. Pero se lo repensó. Horas antes de la ceremonia de apertura en Tokio, el comité olímpico de Uzbekistán le comunicó que le retiraba el honor de ser la abanderada. “Estoy muy ofendida, por supuesto”, declaró esta atleta que ha zarandeado los primeros días de los Juegos como lo ha hizo también ayer la japonesa Nishiya, que declaró estar “deleitada”.