Las autoridades haitianas y los investigadores del FBI consideran al primer ministro como la figura máxima detrás de este crimen, junto al médico Sanon y a John Joel Joseph, un exsenador haitiano, hoy prófugo de la justicia.
Se trata de una bomba política, si se tiene en cuenta que Claude Joseph gobierna el país como reemplazo del presidente asesinado.
Precisamente hoy, el primer ministro se refirió a los funerales del mandatario.
“Se hizo un acuerdo con la esposa del presidente Moïse para crear una comisión que organice un funeral solemne y digno para el jefe de Estado del país”, dijo Joseph.