Una de las voces más relevantes del cine brasileño actual, Kleber Mendonça Fihlo, ya advirtió del peligro que corría este centro durante el Festival de Cannes, celebrado apenas unas semanas antes de que sucediera este incendio.
El desastre acabó con alrededor de cuatro toneladas de materiales y dos mil impresiones, así como otros elementos dañados a causa de las labores de extinción del fuego de los bomberos, de los que ningún técnico ha podido hacerse cargo porque el personal de la Cinemateca fue despedido hace casi un año, tal y como puso de relieve en redes sociales Fernanda Coelho, especialista en conservación de la Cinemateca, que se acercó al archivo para comprobar la magnitud de los daños.