06/07/2021 01:21
Las ferias de arte revolucionaron la venta de pintura y escultura en todo el mundo. Antes el arte se vendía en galerías y subastas. También en los estudios de artistas que no tenían galería. Pero desde la aparición de las ferias, una parte importante de las ventas se realiza ahí. Hace ya años tuve el encargo de la Fira de Barcelona de pensar qué podría hacer nuestra ciudad para no quedarse atrás, visto el éxito de Arco en Madrid. Propuse crear una feria titulada Diálogos de Arte en Barcelona, donde, además de vender, se premiarían los mejores diálogos artísticos entre artistas. La idea entusiasmó a la Fira, pero tuvo la oposición del entonces presidente de la asociación más importante de galerías, que abogaba por hacer una feria como la de Maastricht, donde además de arte se venden otros objetos, como plata antigua, feria que jamás se realizó en Barcelona. Ahora que Arco abre de nuevo sus puertas, con un prestigio justamente ganado, me planteo qué podría hacer Barcelona en favor de sus galeristas, sus artistas e incluso sus coleccionistas. Es cierto que algunos van a Arco, pero la mayoría no, y sigo pensando que una feria importante en Barcelona ayudaría mucho al sector, que tanto lo necesita.