El Estado de El Salvador rechazó asistir a la audiencia pública convocada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), para conocer la situación general de ese país en materia de derechos humanos.
A través de una nota enviada a la CIDH, el gobierno salvadoreño justificó su negativa a acatar la convocatoria debido a que la considera como carente “de equilibrio” entre los participantes y que podría prestarse para su instrumentalización para un uso mediático”.
El documento recalca que, el país tiene interés de colaborar con la CIDH, “pero a través de mecanismos que generen equilibrio, que aseguren condiciones de equilibrio entre los participantes, lo que no considera garantizado en esta convocatoria”.