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El presidente Miguel Díaz-Canel señaló que Cuba es de amor, paz y solidaridad, y llamó a la ciudadanía a ponerle corazón a la obra común.
En una concentración donde se reunieron más de 100 mil habitantes de La Habana, Díaz-Canel emplazó al pueblo isleño a encontrar las causas profundas de la violencia que se manifestó el pasado 11 de julio, cuando grupos de personas protestaron en diferentes ciudades.
Igualmente, llamó a realizar el trabajo pendiente para que predomine la tradición de los honestos, de los justos, de los honorables, de los alegres hijos de la isla antillana.