El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.ETIENNE LAURENTEFE
El que se antojaba un viaje con el que Sánchez buscaba algo de oxígeno y darse pisto en Estados Unidos se le ha acabado atragantando. Porque si ya era clamoroso el perjuicio para la imagen y los intereses de nuestro país que cruzara el charco sin conseguir que alto cargo alguno de la Administración Biden fuera a recibirle, la imprudente actitud que está demostrando en su gira va a acabar por deteriorar todavía más las ya gélidas relaciones entre la Casa Blanca y Moncloa. Y eso sí que es