La distante relación que mantuvo Donald Trump con Europa alimentó el convencimiento general entre los responsables políticos de que la relación transatlántica nunca volvería a ser la misma. Sin embargo, han pasado pocos meses desde la llegada de Biden a la Casa Blanca y la rapidez con la que el nuevo mandatario ha encauzado la normalidad diplomática de la era pre Trump es sorprendente. Cierto es que Biden no se quedó quieto, viró la política internacional de EE UU desde el primer momento y desmanteló el aislacionismo de Trump pocas semanas después de tomar el poder.