La rama afgana del Estado Islámico (ISIS), que se autodenomina Estado de Khorasán (ISIS-K), se adjudicó los atentados suicidas registrados en el aeropuerto de Kabul ayer, con al menos 60 muertos afganos y 13 militares estadounidenses fallecidos. Además, hay al menos 140 heridos civiles y otros 18 del servicio de EEUU. Los funcionarios advirtieron que el número de víctimas podría aumentar.