Se trata del Instituto de Tecnología en Inmunobiológicos de la Fundación Oswaldo Cruz, de Brasil; y la empresa biofarmacéutica del sector privado Sinergium Biotech, en Argentina
Según los expertos, se busca aprovechar las capacidades de fabricación existentes para ayudar transferir la tecnología de vacunas desarrollada por Moderna en EE. UU.