La
es venerada por muchos británicos, pero la cultura popular ha adoptado esta icónica bandera para tapizar muebles, diseñar ropas o comercializar música por todo el mundo, hasta convertirla en algo casi banal, una tendencia que no deja de crecer en el
En una de sus apariciones recientes más destacadas, la cantante Dua Lipa -británica de raíces albanokosovares- sorprendió ataviada con un vestido de la Union Jack a cargo de Vivienne Westwood en su actuación de los últimos Brit Awards.
No es novedad, ni patriotismo. La “Spice Girl” Geri Halliwell, David Bowie o el guitarrista de “The Who”, Pete Townshend, ya lo habían hecho antes, pero la Union Jack ha conseguido pasar de generación en generación sin perder popularidad ni frescura.